GÉNERO: Aventura
DESARROLLADORA: VectorCell
DISTRIBUIDORA: Ubisoft
VERSIONES: PC, PS3, Xbox 360
FECHA DE LANZAMIENTO: 21.08.2013
VERSIÓN ANALIZADA: PC
UN REMAKE PARA EL OLVIDO
Flashback es, sin duda, uno de los nombres más ilustres de la historia del videojuego. Lanzado en 1.993 por la extinta Delphine Software, supuso un auténtico boom tanto en ordenadores como en consolas de 16 bits, un éxito que no tuvo reflejo en su continuación, Fade to Black, lo que propició la muerte prematura de la saga. Así que la idea de revivir aquellos mágicos momentos del original con las técnicas actuales, suena muy apetecible, ¿verdad? Ubisoft no ha querido hacer un copia y pega del original, en plan Another World 20th Annyversary –que para lo que ha sido el resultado final, casi hubiese sido mejor–, sino que han ido un pasito más allá. Flashback Remake, o Flashback a secas, se acoge a la moda de los juegos 2.5D que tan bien están funcionando en los lanzamientos digitales de los últimos años. Así dicho, y teniendo en cuenta cómo era el juego original, la verdad es que la fórmula parece quedarle como anillo al dedo, y en ciertos aspectos así es.
Empezando por el tema visual, este Flashback se siente como una puesta al día del original hasta cierto punto acertada. No es una reimaginación al completo, ya que se intercalan escenarios y personajes clavados al original, con alguna cosita de cosecha propia como por ejemplo un nivel en el que pilotamos una moto, pero todo está correctamente realizado y es fácilmente identificable con lo que vimos en los 90. El apartado sonoro muestra melodías interesantes y voces dobladas al castellano, aunque eso sí, la entonación de algunas es bastante discutible. En líneas generales Flashback está lejos de ser un prodigio técnico en cuanto a estándares actuales, pero se deja ver y oír bien. Sin embargo, una vez metidos en materia jugable, empiezan a acabarse los argumentos favorables.
Bastaría haber copiado el desarrollo del original y darle algo de dinamismo al control de Conrad, el protagonista, para que este remake hubiese sido un éxito, pero desgraciadamente no ha sido así. Es cierto que el manejo del personaje ha ganado en rapidez y posibilidades, es más, incluso ahora podrá mejorar sus habilidades en plan juego de rol -aunque sus efectos apenas se noten, todo sea dicho-, pero pronto nos daremos cuenta de que hay ciertos aspectos jugables que rozan lo inadmisible. Ese encanto que tenía el original, de sentirnos perdidos en un entorno hostil, ha desaparecido por completo. Por poneros un ejemplo, ahora disponemos de un mapa que nos guía hasta el siguiente objetivo, de un botón que resalta a las trampas y los enemigos, y de un interfaz que inunda un buen trozo de la pantalla, algo totalmente opuesto a la experiencia original. Además, el Conrad actual parece haberse convertido en un tipo chistoso, que se lía a soltar comentarios jocosos que no pegan con el Conrad viejo.
Los momentos interesantes, que haberlos haylos, rápidamente se ven empañados por un montón de bugs impropios de un videojuego actual. El combate cuenta con un sistema de apuntado totalmente libre que podría considerarse algo positivo, sin embargo su control con el stick analógico resulta un tanto errático a la hora de acertar al blanco. Enemigos que se quedan en una esquina mientras los machacas a distancia, otros que no varían su rutina aunque les masacremos, jefes finales que se atascan en el escenario, incluso algunos que intentan moverse en el eje de profundidad… Sí, no tiene sentido en un juego 2D, pero así es. Detalles como el hecho de que en las escenas animadas aparezca el botón para saltártelas casi en mitad de la pantalla, o que muchos de los puntos de guardado te hagan repetir secciones anodinas, denotan una falta de cariño sangrante. Da la sensación de que estamos ante un producto inacabado, cuyas ideas parecen buenas, pero que están terriblemente llevadas a la práctica. Los momentos que merecen la pena curiosamente coinciden cuando no se aleja mucho del concepto del original. ¿Lo mejor del juego? Pues que se ha incluido el Flashback original, y con eso queda dicho todo.
Podríamos pensar que el hecho de basarse en uno de los grandes clásicos 2D de todos los tiempos, hace que le pidamos más que al resto, pero no, este juego es un desastre llámese como se llame. Lo verdaderamente chocante es que el fundador de la compañía Vectorcell es el propio Paul Cuiset, creador del primer Flashback, y es más, incluso algunos de sus miembros pertenecieron a la mismísima Delphine Software. Empecé el artículo diciendo que Flashback era uno de los nombres más ilustres de la historia, y bien que podría haberse quedado así, sin que haya tenido que sufrir esta mancha en forma de remake. En definitiva, un título poco recomendable y una oportunidad perdida de refrescar con dignidad una franquicia tan querida entre la comunidad de jugadores de todo el mundo.
LO MEJOR
Algunas ideas interesantes como el apuntado libre o la mejora de habilidades.
LO PEOR
Bugs a porrón en el comportamiento de los enemigos.
Parece un producto inacabado, o no testeado.