GÉNERO: Arcade
DESARROLLADORA: Easter Egg
DISTRIBUIDORA: Easter Egg
VERSIONES: Amstrad CPC
FECHA DE LANZAMIENTO: 2012
HACIENDO JUSTICIA AL AMSTRAD CPC
Uno de los juegos que dio nombre y reconocimiento al conocido género «de naves» fue, sin duda, R-Type. Desarrollado por Irem Corporation y lanzado en los salones recreativos de medio mundo en el año 1987, pronto se convirtió en el referente indiscutible de los shooters de naves de la época. El planteamiento era sencillo: guiar a una nave bautizada como R-9 de un punto a otro del escenario machacando todo bicho viviente que se interpusiese en su camino. No faltaron a la cita espectaculares escenarios espaciales, power ups de todo tipo, y enemigos finales que ocupaban un trozo enorme de la pantalla. El éxito de R-Type fue inmediato, y como era de esperar, rápidamente se sucedieron las correspondientes adaptaciones a formatos domésticos. Muchas de ellas consiguieron captar el espíritu de la recreativa mucho mejor de lo esperado, yo mismo tuve la oportunidad de disfrutar largo y tendido de la versión para Amstrad CPC 464, y por aquél entonces quedé encantado con la conversión. Es cierto que se perdían algunas cosas de la recreativa, pero vistas las conversiones de otras máquinas que pululaban por aquellos tiempos, me pareció una adaptación muy potable. Aquí podéis ver un vídeo de la misma.
Pero no me voy a extender en hablaros de R-Type y sus diferentes versiones, sino de algo mucho más curioso: R-Type Remake. Todos los que vivimos, y añoramos la época de los 8 bits, sabemos que actualmente existe una corriente muy fuerte de apasionados de estas máquinas que siguen sacando jugo al mítico procesador Z80, el corazón de los microordenadores de los 80, en sus diferentes versiones. Y resulta, cuanto menos sorprendente, lo que máquinas como el citado Amstrad CPC podían hacer, y que para desgracia de los que vivimos en aquellos tiempos, nos perdimos. Easter Egg es una pequeño grupo de desarrollo francés que se ha dispuesto a “hacer justicia” con este ordenador, muchas veces maltratado con adaptaciones directas del Spectrum, ¿y qué mejor forma de hacerlo que escogiendo un juego tan mítico como R-Type?
R-Type: Remake es exactamente el mismo juego de antaño pero con una cantidad importante de mejoras que lo encumbran como una joya, tanto técnica como jugable. Empezando por la impactante secuencia de presentación extraída de la recreativa, pasando por los escenarios, prácticamente monocromos de la primera versión, y que ahora despliegan un impresionante de colorido gracias al uso del modo 0 el cual permite poner hasta 16 colores en pantalla simultáneamente, scroll paralax incluido, todo ello sin perder ni un ápice de velocidad. A nivel sonoro el juego vuelve a dejarnos impresionados con unas adaptaciones sensacionales de la versión original, un aspecto a destacar porque la versión original de Amstrad carecía de melodías. Además, si optamos por escuchar únicamente efectos sonoros -puedes elegir música con efectos, efectos o mixto-, éstos se muestran en perfecto estéreo, algo casi impensable en un juego de Amstrad de la década de los 80.
A nivel jugable R-Type: Remake es un calco del original, no ha habido concesiones de ningún tipo, disponemos de exactamente del mismo control, de los mismos enemigos, de los mismo niveles… En definitiva todo el contenido que había en la recreativa almacenado en un ordenador casero, dificultad incluida. Porque si de algo podía presumir el R-Type original era de su elevada jugabilidad, y dificultad, sobre todo a partir del segundo escenario en el que la cosa pasaba de castaño a oscuro. Y sabedores de que hoy en día nos hemos malacostumbrado, los chicos de Easter Egg han tenido el detalle de dejarnos modificar el número de vidas y continuaciones, además de incluir un Modo Casual” bastante permisivo, que nos permite mantener los power ups y continuar desde el mismo lugar cuando seamos alcanzados por el fuego enemigo. No obstante, yo recomiendo jugarlo en Modo Arcade que es donde se saborea la auténtica experiencia R-Type.
Pocas, muy pocas pegas se le pueden poner a este estupendo trabajo de optimización, si acaso que el juego necesita de un Amstrad CPC de 128 KB, ya que los 64 KB del modelo inferior son a todas luces insuficientes ante semejante despliegue técnico. El juego es completamente gratuito, y podéis bajarlo desde su página oficial y disfrutarlo por medio de un emulador. Quizá los más jóvenes no le deis un valor especial, pero para aquellos que trasteamos con aquellos ordenadores, no deja de sorprendernos lo que podían llegar a hacer estas máquinas, y que sólo en contadas ocasiones tuvimos la oportunidad de ver.
LO MEJOR
Técnicamente hay un salto brutal respecto a la primera versión.
Se han incluido modos de juego para todos los gustos.
LO PEOR
Por decir algo, que no entra en un Amstrad de 64 KB, algo lógico.