GÉNERO: Puzzles
DESARROLLADORA: Valve Corporation
DISTRIBUIDORA: Valve Corporation
VERSIONES: MAC, PC, PS3, Xbox 360
FECHA DE LANZAMIENTO: 18.04.2011
VERSIÓN ANALIZADA: PC
¡¡BRILLANTE!!
No me voy a andar con rodeos. Portal 2 es un juego sensacional, así de sencillo y así de simple. Lo que en un principio se presentó ante nosotros como un experimento sin demasiadas pretensiones en Portal 1, Valve ha sabido coger esos mimbres de genialidad y llevarlos a una cota de excelencia que pocas, muy pocas compañías en la industria, son capaces de alcanzar. No estoy hablando de hacer una continuación digna de un concepto que ya se demostró revolucionario, sino de mejorarlo y alicatarlo en todos y cada uno de sus aspectos hasta conseguir un producto redondo al que apenas se le puede reprochar nada. Pero vayamos por partes, ¿qué ofrece este Portal 2 para que me haya parecido tan rematadamente bueno? En mi opinión, algo muy difícil de encontrar hoy en día: un diseño jugable soberbio y sin apenas fisuras, una demostración de talento que, para variar, no está focalizada en un motor gráfico maravilloso, sino en la propia jugabilidad.
Portal 2 nos traslada nuevamente a las instalaciones de la misteriosa empresa Aperture Sciences. La protagonista de la aventura vuelve a ser Chell, la cual es despertada tras un largo periodo de criogenización por Wheatly, una forma robótica que la guiará en los primeros compases por unas instalaciones muy cambiadas respecto a las vistas en el primer Portal. ¿Qué hacemos nuevamente aquí? ¿Quien es Wheatley y por qué nos ayuda? ¿Por qué hemos sido despertados precisamente ahora? Algunas de estas preguntas obtendrán respuesta mientras que otras se quedarán en el limbo, objeto de todo tipo de especulaciones. Lo que permanece intacto es ese aire de misterio que viene rodeando esta incipiente saga, y que consigue contar parte de una historia abierta a teorías y suposiciones. Todo ello salpicado de personajes memorables, diálogos exquisitos y un tratamiento del humor como pocas veces hemos disfrutado en un videojuego.
Jugablemente Portal 2 sigue luciendo ese fantástico y original desarrollo que tanto nos encandiló en su predecesor. Toda la acción gira en torno a la creación de portales y su manipulación para superar determinadas pruebas o acceder a lugares imposibles. El juego nos irá planteando puzzles y retos en zonas de pruebas, pero también hemos de hacer uso de los portales para avanzar entre las inmensas instalaciones de Aperture Science. El tamaño de las mismas ha sufrido un aumento considerable respecto a las visitadas en el primer Portal, y no es casualidad que pasemos mucho tiempo explorando el escenario en busca de esa rebuscada combinación de portales que nos permita avanzar en la aventura. Pero no todo se reduce únicamente a la creación y manipulación de portales. Esta secuela pone en escena nuevos elementos como los geles, los cuales pueden cambiar las propiedades de una superficie para poder saltar más alto, correr más rápido, o transformar una pared sólida en una pared ideal para alojar un portal. También hay nuevas barreras magnéticas, túneles de plasma, y en definitiva, una serie de pequeños alicientes que empastan perfectamente con el mecanismo jugable de puzzles.
Lo que no es tan sencillo de explicar son las sensaciones que te transmite una partida de Portal 2. No sabría decir qué es mejor; si ese exquisito diseño de puzzles que te hace soltar más de una exclamación de admiración una vez lo has superado; o la genial recreación de todos los personajes y diálogos capaces de arrancarnos más de una carcajada. Lo cierto es que cada partida de Portal 2 se convierte en una experiencia muy gratificamente, su desarrollo es una recompensa casi contínua que nos invita a intentar una prueba más, a seguir conociendo nuevas localizaciones, a indagar en los asuntos de Aperture Sciences y desvelar el propósito final de la compañía. Son 8-10 horas de puro lujo jugable que se dejan disfrutar de principio a fin, no hay altibajos como ocurre en otros juegos, toda la acción fluye de manera brillante hasta que desgraciadamente se acaba más pronto de lo que me hubiese gustado. Y lo cierto es que, por mucho que me pese, la duración me parece adecuada. Quizá se podría haber estirado un poco más -es más bien un deseo que una necesidad real-, pero por otro lado mejor disfrutar a tope todos y cada unos de los minutos de juego, que alargarlo rebajando el nivel de calidad global. Para paliar esta querencia, Portal 2 incluye un modo multijugador cooperativo que eleva al cubo las posibilidades de cada puzle, una auténtica delicia que estira de manera natural la duración del juego hasta donde tú quieras.
Y es que Portal 2 es una de esas escasas excepciones en el mundo actual de los videojuegos que gracias a un diseño jugable magistral, no necesita deleitarnos con un motor gráfico de última hornada. De hecho, el juego se basa en el archiconocido motor Source ya usado en innumerables títulos de la compañía, y que se ha demostrado tan sólido como eficaz a lo largo de los años. Las interiores de Aperture Sciences están recreados con una sobriedad bien entendida, los efectos de iluminación han sufrido una considerable mejora respecto al primer Portal, pero lo mejor de todo, sin duda, es la humanidad con la que se ha dotado a los robots que pueblan las instalaciones: sus animaciones, su expresividad, esos diálogos… Es difícil encontrar un juego cuyos personajes tengan tanto carisma en tan pocas líneas de díalogo. A esto contribuye el sensacional doblaje al castellano, de los mejores que puedes encontrar hoy en día, tanto por entonación como por calidad de las voces. Portal 2 no es un juego revolucionario tecnológicamente -ni lo pretende-, su fuerte está en otro campo, el campo que más importancia debería tener todo videojuego, y no es otro que el de la jugabilidad.
Hasta ahora todo han sido alabanzas pero también deberíamos preguntarnos, ¿hay algo malo en Portal 2? Malo, como tal, no, pero sí que hay algún aspecto que podría haberse pulido más. Uno de ellos es el hecho de haber demasiados momentos de carga entre escenarios, herencia quizá de un motor algo anticuado; o que se sigamos sabiendo poco de lo que es Aperture Sciences y de su relación con el mundo Half-Life, que la hay. Pero más allá de estos detalles, no me cabe la menor duda de que nos encontramos ante un juego brillante, no sé si tanto como para hablar de un punto de inflexión en la forma de entender los juegos como tal, pero sí como un producto que apuesta por unos estándares de calidad en cuanto al diseño jugable al alcance de pocos, muy pocos juegos. No me queda más que descubrirme ante el trabajo realizado por los chicos de Valve Software, una compañía que parece ajena a las modas actuales de producir juegos año sí, año también, y que sigue triunfando con cada título que lanza al mercado. Si el nivel de ventas de un título se midiese por la calidad y el ingenio, Portal 2 debería estar en el puesto del Call of Duty de turno.
LO MEJOR
El diseño de los puzzles es sensacional.
Las novedades incluidas sirven para mejorar la jugabilidad.
La personalidad de los robots y el sentido del humor que rodea al juego.
LO PEOR
Los tiempos de carga son más habituales de lo esperado.
No se dan muchas respuestas a nivel de guión.
9/10
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